No todos los tipos de calzado funcionan de la misma manera con nuestros oufits, es por ello que, en el armario de un hombre y de una mujer, deben exitir estos tipos de calzado si o si, para que puedas combinarlos con todos los outfits que tengas en mente.
Para ellas…
Unos botines negros: Porque los puedes llevar todos los días de otoño a invierno y siempre verte bien y elegante.
Unos stilettos en nude: Porque son clásicos, elegantes y camaleónicos.
Unos botines concho de vino o cafés: Porque así como los negros son el eterno salvavidas del otoño e invierno.
Unos tenis blancos: Porque pueden ser lo que tu quieras ser, de lo más casuales a lo más elegantes posibles.
Unos loafers: Porque son igual de cómodos y bonitos que unos flats pero mucho más cool y elegantes.
Para ellos…
Unos tenis blancos: Su versatilidad permite que se combinen prácticamente con cualquier prenda.
Unas botas casuales: Debido al éxito que han alcanzado, es casi imperdonable que un hombre no tenga por lo menos un par de éstas.
Unos tennis deportivos: Aunque hay quienes simplemente no lo entienden, no todos los tenis son ideales para hacer ejercicio.
Unos desert boots: Justo cuando quieres encontrar un punto medio entre los sneakers y unos zapatos de vestir, estas botas están ahí para salvarte de ese dilema.
Unos old skool: son perfectos para lograr un look casual un tanto más relajado que el que se lograría con sus primos los tennis blancos.
A pesar de encontrarse en la parte baja del atuendo de cada persona, los zapatos dicen mucho de la personalidad de cada persona. Esa es la razón principal por la que siempre deben lucir presentables para causar una buena impresión frente al mundo que se encuentra siempre al pendiente del estilo.